Redondear números decimales puede ser una tarea desalentadora, especialmente si no sabes cuáles reglas seguir. Afortunadamente, hay algunos trucos simples que te pueden ayudar a redondear los números de manera rápida y precisa. En este artículo descubrirás como hacerlo correctamente.
Método para redondear números decimales
El método del redondeo equivale a simplificar un número decimal (quitarle cifras decimales), variando su valor el mínimo posible. Esto lo hacemos aproximando el dígito decimal que queremos redondear, hacia arriba o hacia abajo.
Para decidir cuál de los dos casos tenemos que aplicar, debemos fijarnos en la siguiente cifra decimal a la que estamos redondeando:
- Si la siguiente cifra decimal es menor que cinco, entonces el valor que queremos redondear se queda igual (a este caso, se le conoce como redondeo hacia abajo).
- Si la siguiente cifra decimal es mayor o igual que cinco, entonces se le suma uno al valor que queremos redondear (a este caso, se le conoce como redondeo hacia arriba).
A continuación, te planteamos un ejemplo para que acabes de entender el método de aproximación por redondeo:
Ejemplo: Tenemos el número 14,253 y queremos redondearlo a la décima.
- En este caso debemos fijarnos en la centésima, puesto que es la siguiente cifra después de la décima.
- Por lo tanto, debemos fijarnos en el 5.
- El 5 es igual a 5, como resultado, redondeamos hacia arriba (sumamos uno al valor que estamos aproximando). En nuestro caso, la décima es igual a: 2+1 = 3.
- El valor redondeado a la décima, nos quedaría tal que así 14,3.
Ahora que ya conoces las reglas del redondeo de números decimales, aplicables para aproximar cualquier valor, vamos a ver ejemplos concretos. Empezaremos por redondear valores a la unidad, seguiremos con la décima y finalizaremos con la centésima.
Aunque, cabe destacar que, este mismo método, se aplica a cualquier cifra decimal. Incluso puedes aproximar a la millonésima y mucho más. Así que la posición decimal no hace variar el método.
Ejemplo 1: Redondear a la unidad
El número 1,375 se puede redondear de diversas maneras. En este ejemplo, lo redondearemos a la unidad más cercana. Comenzamos mirando el dígito que está después de la coma (3). Debido a que es menor que 5, el número se redondea hacia abajo y, por lo tanto, el uno se queda igual. Así que el número nos queda: 1.
Ejemplo 2: Redondear a la décima
En este ejemplo, redondearemos los decimales a la décima más cercana. Comenzamos con el número 0,64. La décima más cercana al número es 0,6, por lo que debemos fijarnos en la siguiente cifra (el 4). Como el 4 es menor que 5, aplicamos el redondeo hacia abajo. Así que el número nos queda: 0,6.
Ejemplo 3: Redondear a la centésima
Supongamos que queremos redondear el número 2,4567 a la centésima. Aplicando el mismo principio, debemos fijarnos en la milésima (que es la cifra de después de la centésima), en nuestro caso es el 6. Y como 6 es mayor que 5, redondeamos hacia arriba (sumamos uno a la centésima actual). El número nos queda: 2,46.
Ventajas de usar la aproximación por redondeo de cifras
Ya has visto cómo funciona el método del redondeo, pero seguramente te estarás preguntando para qué sirve todo esto. Y la verdad es que tiene infinitas aplicaciones prácticas, en especial relacionadas con nuestro día a día.
Puesto que este concepto matemático, nos permite simplificar los números con los que tratamos. Y de esta manera, somos capaces de procesar mejor la información.
Por ejemplo, cuando vas a comprar y quieres saber cuánto te costarán cinco manzanas que valen 2,54 cada una. Es más fácil aproximar a la décima (2,5) y multiplicar 2,5 por las cinco manzanas. Aunque, no te da exacto, lo aproximas para calcularlo más rápido.
Y esto se puede aplicar a prácticamente, cualquier ámbito de nuestra vida. Es por eso, que cuando aprendes a hacer aproximaciones de este tipo con rapidez y agilidad, entiendes el verdadero potencial de este concepto matemático.