¿Cómo son los números decimales?

Los números decimales son de gran importancia en el mundo matemático, pero ¿sabemos realmente qué son y cómo funcionan? En este artículo lo explicaremos todo.

¿Qué son los números decimales?

Los números decimales son números no enteros (no comprendidos por el conjunto entero), que tienen una parte entera y una parte decimal. Esta parte decimal se escribe detrás de una coma y nos permite expresar valores más pequeños que la unidad.

Los números decimales son una forma de representar números fraccionarios. Esto se debe a que el concepto de fracción es bastante similar al de valor decimal. Podemos verlo, en el siguiente ejemplo: 7/2 es igual a 3,5. Mantienen una equivalencia numérica, solo que se escriben diferente.

El número «3,5» es un número decimal que se lee como «tres coma cinco», su parte entera es el 3 y su parte decimal es igual a 5. Como los números decimales se expresan mediante el sistema de notación decimal, podemos descomponer el número así:

Qué son los números decimales

Nomenclatura decimal

En la escritura numérica de estos números, se suelen usar dos tipos de notaciones: la notación estándar (o notación decimal) y la notación científica. Esta primera es la más habitual y es la que hemos estado utilizando hasta ahora.

Mientras que la notación científica se trata de una forma abreviada de la notación estándar. En la notación científica, se escribe un número decimal como un número entero multiplicado por una potencia de 10. Por ejemplo, la cantidad 0,0054 se puede escribir en notación científica como 5,4 · 10-3.

En cuanto a la escritura no numérica de los decimales, empleamos una notación que se refiere a la posición que ocupa cada dígito decimal. Pues igual que la parte entera tiene: la unidad, la decena, la centena… La parte decimal tiene: la décima, la centésima, la milésima…

Cómo escribir decimales

Lo que marca el nombre de cada cifra es la posición que tiene respecto a la coma decimal. De esta forma, cuando tienes un número decimal, y quieres saber qué valor tiene la centésima, debes fijarte en la segunda cifra (desde la coma decimal, hacia la derecha). En el anterior caso, la centésima es igual a 5.

Tipos de decimales

Los números decimales se pueden clasificar de la siguiente manera:

  • Decimal exacto: tiene un número determinado y finito de decimales. Por ejemplo: el 9,263.
  • Decimal periódico: tiene un número infinito de decimales.
    • Decimal periódico puro: la parte decimal está compuesta por un número que se repite de manera infinita. Por ejemplo: el 2,1515151515… Puesto que el 15 se repite indefinidamente.
    • Decimal periódico mixto: la parte decimal está compuesta de un valor, seguido de otro número que se repite de manera infinita. Por ejemplo: el 2,4615151515… Puesto que el 46 no se repite.
  • Decimal no periódico: tiene una parte decimal infinita, que no se repite. En este apartado encontramos algunas constantes matemáticas, la raíz cuadrada de dos…
Tipos de números decimales

Propiedades de los números decimales

Los números decimales tienen varias propiedades, entre ellas:

  • Un decimal no se altera si se añaden ceros a la derecha, por lo tanto, el número 0,25 es equivalente a 0,250 y a 0,2500. Básicamente, porque expresan la misma cantidad.
  • Los decimales son equivalentes a las fracciones, por ejemplo, la mitad de la unidad (1/2) se representa con 0,5.
  • Si multiplicamos o dividimos un número decimal por potencias de diez, debemos correr la coma decimal: hacia la derecha si estamos multiplicando y hacia la izquierda si estamos dividiendo.
Propiedades de los números decimales
  • Se puede simplificar un decimal, esto se hace por medio del redondeo de decimales. Este método consiste en expresar menos cifras decimales, modificando al mínimo el valor del número. Si quieres aprender a usar este sistema de simplificación, te recomendamos que entres en este último enlace.

Representación de los números decimales

El conjunto decimal se puede representar en la recta numérica igual que todos los otros conjuntos.

Partiendo de que los decimales tienen una parte entera y una decimal (más pequeña que la unidad), podemos deducir que los decimales se encuentran representados entre los enteros. Por ejemplo, entre el número 0 y el 1, encontramos infinitos decimales. A continuación, puedes verlo representado en la recta:

Recta numérica de los números decimales

Como se puede ver en la imagen, hemos escrito las diez décimas que hay entre el 0 y el 1. Aunque, entre esos dos números hay infinitos decimales, así que se puede llegar a hacer representaciones muy complejas. Y además, esto no solo pasa entre el 0 y el 1, sino que pasa entre todos los números enteros.

Operaciones de los números decimales

Las operaciones de los números decimales son similares a las de los números enteros. La única diferencia es que se deben tener en cuenta las posiciones de los dígitos decimales. Por lo tanto, antes de resolver cualquier operación, debes fijarte bien en que estés operando siempre con las mismas cifras: las décimas con las décimas, las centésimas con las centésimas…

A continuación, vamos a hacer un breve repaso de las cuatro operaciones aritméticas básicas con decimales:

  • Suma de decimales:
Suma de decimales
  • Resta de decimales:
Resta de decimales
  • Multiplicación de decimales:
Multiplicación de decimales
  • División de decimales:
División de decimales

Usos y aplicaciones de los números decimales

Los números decimales se usan mucho en la vida diaria y en las matemáticas. Por ejemplo, cuando compras algo en una tienda, necesitas saber el precio de lo que estás comprando, y ese precio estará expresado en números decimales. También, se utilizan para medir las distancias, los pesos y otros aspectos de la vida cotidiana.

En las matemáticas, los números decimales nos permiten expresar cantidades muy pequeñas o muy grandes con facilidad. Y también nos permiten hacer cálculos con mayor precisión. Por ejemplo, si queremos calcular la mitad de 3 unidades podemos dividirlo en dos partes iguales y obtener 1,5 unidades.

¿Qué son los cuaterniones?

Etimológicamente, cuaterniones o cuaternios proviene del latín quaterni.  En español, el vocablo se traduce como “por cuatro”. Sin embargo, su interpretación quiere decir “número de cuatro elementos».

Los cuaterniones son elementos de un cuerpo no permutante creados inicialmente por William Rowan Hamilton. Se define como cuaterniones a la extensión de los números reales que componen una numeración hipercompleja. De hecho, son bastante parecidos a los números complejos.

Es decir, los cuaterniones ocurren debido a una amplificación causada analógicamente. En cambio, los números complejos se producen como una prolongación de números reales por la suma de la unidad imaginaria i, por ende, i al cuadrado es igual a -1. En el primer caso, se añaden las unidades imaginarias k, i y j a los números reales.

Por lo tanto, con relación a los cuaterniones tenemos que: i2 = j2 = k2 = ijk = -1. Esta representación corresponde a los dispuestos en la tabla de Cayley. En este punto cabe mencionar que, i, j, k y 1 son los cuatro pilares fundamentales de los cuaternios.

×1ijk
11ijk
ii-1k-j
jj-k-1i
kkj-i-1
Tabla de Cayley

William Hamilton inventó los cuaterniones en 1843 como un método que le permitía multiplicar y dividir vectores, rotarlos y estirarlos.

¿Cómo se componen los cuaterniones?

Los cuaterniones forman un álgebra encantadora en la que cada uno de sus objetos contiene 4 variables. De hecho, a veces son conocidas como parámetros de Euler que no deben confundirse con los ángulos de Euler. Estos objetos se pueden sumar y multiplicar como una sola unidad de manera similar al álgebra de números habitual.

Sin embargo, hay una diferencia. En términos matemáticos, la multiplicación de cuaterniones no es conmutativa.

Los cuaterniones tienen 4 dimensiones. Cada cuaternión consta de 4 números escalares, una dimensión real y 3 dimensiones imaginarias. Cada una de estas dimensiones imaginarias tiene un valor unitario de la raíz cuadrada de -1. Sin embargo, son diferentes raíces cuadradas de -1 todas perpendiculares entre sí, conocidas como i, j y k. Entonces, un cuaternión se puede representar de la siguiente manera:

x = (a, b, c, d) lo que se escribe x = a + bi + cj + dk

De acuerdo con lo anterior, a, b, c y d representan números reales inequívocamente definidos por cada cuaternión.  Por su parte, los números 1, i, j y k son básicos. Si queremos representar los cuaterniones por medio de un conjunto, podemos hacer lo siguiente: Suponiendo el IR4 representa el conjunto, la expresión es: IR4= {a + bi + cj + dk: a, b, c, d ∈ IR}

Este conjunto es consecuente con el espacio real de cuatro dimensiones. Del mismo modo que un conjunto de números reales concuerda con el espacio existente en una dimensión y el conjunto de números complejos coincide con el espacio dimensional doble.

¿Cuál es la estructura algebraica de los cuaterniones?

Un cuaternión ejemplifica un cuerpo irregular. Esto quiere decir que se trata de una estructura algebraica similar a un cuerpo. Sin embargo, no es conmutativo en la multiplicación. Dicho de otra manera, cumple con todas las cualidades de un cuerpo, pero su resultado no es conmutativo.

La multiplicación de cuaterniones es asociativa. Además, todo cuaternión no nulo cuenta con un único inverso. Los cuaterniones no constituyen un álgebra asociativa en relación con los números complejos.

Finalmente, de igual manera que los números complejos y los números reales, representan dimensiones vectoriales euclídeas de espacios unitarios o dobles, consecuentemente, los cuaterniones  crean un área vectorial euclídea de cuatro dimensiones.

¿Cómo se representan los cuaterniones en matrices?

Las representaciones matriciales también son propias de los cuaterniones. En este caso, se aplican matrices matemáticas para su expresión. Por ejemplo, si tenemos el cuaternión p = a + bi + cj + dk es posible representarlo en una matriz compleja de 2 x 2 del siguiente modo:

Otra forma de usar las representaciones matriciales en los cuaterniones es por medio de matrices reales de 4 x4. Adicionalmente, al uso de matrices para representar cuaterniones, es posible expresarlos como el producto interno de dos vectores. Siendo así, un componente sería:  = (a1, a2, a3, a4) y el otro {1, i, j, k}.

En este supuesto, el elemento a1 que genera el componente real se escribe separado. Además, para el producto interno se toman en cuenta únicamente las tres bases i, j, k:

x = (a1,  a) = (a1, a2, a3, a4)

¿Qué operaciones básicas se pueden hacer con cuaterniones?

Para sumar y obtener un producto entre un cuaternión y otro, se aplica la aritmética de los números complejos. Esto funciona de igual modo que en el caso del conjunto anterior IR4. Es decir, dicho conjunto más el resto de operaciones, compensa todas las cualidades de un cuerpo. La única relevancia en este caso es que el producto no conmuta.

En el caso de la suma, se lleva a cabo término a término. En todo caso, funciona de un modo parecido al de los números complejos. Es decir:

(a1 + b1i + c1j + d1k) + (a2 + b2i + c2j + d2k) = (a1 + a2) + (b1 + b2)i + (c1 + c2)j + (d1 + d2)k.

Para el producto se aplica de componente a componente. De acuerdo con esto, queda de la siguiente manera:

ab = (a1b1 – a2b2 – a3b3 – a4b4) + (a1b2 + a2b1 + a3b4 – a4b3)i + (a1b3 – a2b4 + a3b1 – a4b2)j + (a1b4 + a2b3 – a3b2 + a4b3)k

Como ya destacamos antes, el producto de cuaterniones nunca es conmutativo. Al contrario, siempre es asociativo. Las operaciones elaboradas con anterioridad pueden llevarse a cabo reemplazando las representaciones.

¿Qué aplicaciones tienen los cuaterniones?

Un cuaternión va mucho más allá de una investigación matemática. Actualmente, poseen diversas aplicaciones. En primer lugar, sirven para comprobar respuestas en la teoría de números. Un ejemplo de esto es el teorema de Lagrange que expone que cualquier número natural se expresa como la sumatoria de 4 cuadrados perfectos.

Por otro lado, tiene aplicaciones en el campo de la física. Los cuaterniones son muy útiles para la mecánica cuántica, el electromagnetismo y mucho más.

Las Propiedades Matemáticas

Las propidades matemáticas son una gran herramienta para resolver operaciones rápidamente, pues son como pequeños trucos de cálculo. En este artículo, explicaremos en detalle las cuatro propiedades más importantes, y concretaremos en qué operaciones aritméticas pueden usarse. Dicho esto, podemos empezar con la explicación.

Propiedad conmutativa

La propiedad conmutativa es una de las propiedades fundamentales de la adición y la multiplicación. Se trata de la propiedad que establece que el orden en el que se suman o multiplican dos números no altera el resultado. Es decir, a+b=b+a y a·b=b·a.

  • Ejemplo de la propiedad conmutativa de la suma:

9 + 5 = 5 + 9 = 14

  • Ejemplo de la propiedad conmutativa de la multiplicación:

9 · 5 = 5 · 9 = 45

Propiedad asociativa

La propiedad asociativa de la multiplicación y la suma se refiere a la capacidad de intercambiar el orden de los términos en una operación (con tres o más términos), sin cambiar el resultado. Esto se puede ilustrar de la siguiente manera:

a + (b + c) = (a + b) + c

a · (b · c) = (a · b) · c

Los términos entre paréntesis se pueden intercambiar, y el resultado será el mismo.

  • Ejemplo de la propiedad asociativa de la suma:

3 + (9 + 5) = (3 + 9) + 5 = 17

  • Ejemplo de la propiedad asociativa de la multiplicación:

3 · (9 · 5) = (3 · 9) · 5 = 135

Propiedad distributiva

La propiedad distributiva es una de las propiedades más importantes que existen, especialmente en el álgebra. Esta propiedad se utiliza para simplificar expresiones y hacer los cálculos más sencillos. La propiedad distributiva se puede aplicar al producto de un número por una suma o resta.

La propiedad distributiva establece que, si tenemos un número y lo multiplicamos por una suma o una diferencia, el resultado será igual a la suma o diferencia de los números individuales multiplicados por el número original.

  • Ejemplo de la propiedad distributiva con el producto de una suma:

3 · (9 + 5) = 3 · 9 + 3 · 5 = 42

  • Ejemplo de la propiedad distributiva con el producto de una resta:

3 · (9 – 5) = 3 · 9 – 3 · 5 = 12

Propiedad identidad o elemento neutro

La propiedad identidad o elemento neutro se refiere a un elemento que no cambia el valor de una operación. En la suma y la resta, el elemento neutro es el 0 y en la multiplicación es el 1. Por lo tanto, se puede decir que:

a + 0 = a

a – 0 = a

a x 1 = a

  • Ejemplo de la propiedad identidad de la suma:

5 + 0 = 5

  • Ejemplo de la propiedad identidad de la resta:

5 – 0 = 5

  • Ejemplo de la propiedad identidad de la multiplicación:

5 · 1 = 5

Propiedades de la resta

Como has podido ver, todas las propiedades que hemos comentado hasta ahora, son aplicables a la suma y a la multiplicación. Pero, solo el elemento neutro es aplicable a la resta. Aunque en realidad, hay un par más de propiedades de la resta:

  • La propiedad fundamental de la resta: la cual dice que: «si sumamos o restamos el mismo número al minuendo y al substraendo, obtenemos una resta equivalente».

A continuación, te lo demostramos con un ejemplo numérico, partiendo de la resta 9 – 5:

9 – 5 = (9 + 1) – (5 + 1) = 4

  • La segunda propiedad de la resta: si sumamos el resultado de una resta más el sustraendo, obtenemos el minuendo:

6 – 4 = 2, y se cumple que 4 + 2 = 6.

Todo sobre el conjunto de los números enteros

El conjunto de los números enteros es una colección de todos los números positivos y negativos. En este artículo, te hablaremos sobre las propiedades de estos números, su representación en la recta numérica, las operaciones que puedes hacer con ellos y mucho más.

¿Qué son los números enteros?

Los números enteros son todos los números naturales y negativos, no decimales. Por lo tanto, en matemáticas, el conjunto de los números enteros es el conjunto de todos los números naturales más el conjunto de los números negativos y el número cero. Este conjunto es, a su vez, es una subcategoría del conjunto de los números racionales.

Los números enteros son los números naturales más los negativos. Por lo tanto, los números enteros comprenden el intervalo siguiente: {-∞, …, -3, -2, -1, 0, 1, 2, 3, …, ∞}. En consecuencia, es de vital importancia entender bien el conjunto de los naturales y sus inversos (los negativos), para poder comprender los enteros.

Subconjuntos de los números Z

A partir de lo que hemos explicado hasta ahora, podemos deducir que existen dos tipos de números enteros: los números enteros positivos (naturales) y los números enteros negativos (negativos). A estos dos conjuntos numéricos se les llama subconjuntos de los números enteros.

Aunque, también podemos plantear otros subconjuntos, como los números impares y pares, y los números primos y compuestos. Pues la teoría de conjuntos aplicada a la aritmética nos permite agrupar los números por medio de cualquier propiedad matemática que los describa.

Ejemplos de números enteros

Para dejar un poco más claro qué es un número entero, a continuación te mostramos unos cuantos ejemplos ordenados: 

-8, -7, -6, -5, -4, -3, -2, -1, 0, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8.

Como ves son los primeros ocho números positivos (1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8), el cero y los inversos de los anteriores números naturales. Evidentemente, estos diecisiete ejemplos son solo una parte de todo el conjunto. Pero, a partir de este pequeño grupo de valores, puedes conceptualizar cualquier número entero.

Características del conjunto de números enteros

Este conjunto numérico tiene una serie de características:

  • Es infinito, pues está compuesto por dos conjuntos numéricos infinitos (el de los números naturales y el de los negativos).
  • Todos los valores de este conjunto tienen signo: positivo (+) o negativo (-), excepto el cero.
  • Tienen un orden determinado: los números negativos son menores que cero y, los positivos son mayores que cero: Negativos < 0 < Positivos.
  • Todos los números enteros son racionales, pero no son fraccionarios.
  • Para cualquier entero positivo existe un entero negativo igual, pero con signo contrario.

Representación de los números enteros

En el anterior apartado hemos comentado por encima del orden de los números enteros. Pero, para verlo aún más claro, te lo vamos a mostrar representado en la recta numérica.

Representación de los números enteros
Recta numérica de los enteros

Como se puede ver, esta recta numérica es la combinación de las rectas numéricas de los números naturales y de los negativos. En resumen, los números negativos de mayor valor absoluto son los que van más a la izquierda (más pequeños). Mientras que los números positivos con mayor valor absoluto son los que van más hacia la derecha (más grandes).

Propiedades de los números enteros

Antes de aprender a hacer operaciones con los enteros, es muy importante conocer una serie de propiedades. De esta manera, podremos operar fácilmente y sin equivocarnos.

Te mostramos estas propiedades en esta lista:

  • Conmutativa: en las sumas y las multiplicaciones de dos valores enteros, no importa el orden de los factores. Por lo tanto, para todos los números enteros a y b:

a + b  = b + a

a · b = b · a

  • Asociativa: en las sumas y las multiplicaciones de tres valores enteros o más, no importa el orden de los factores. Como resultado, para todos los números enteros a, b y c.

a + (b + c) = (a + b) + c

a · (b · c) = (a · b) · c

  • Distributiva: la multiplicación de un número por una suma es equivalente a sacar factor común:

a · (b + c) = a · b + a · c

  • Elemento neutro: existen dos números que cuando participan en una operación con enteros no modifican el valor inicial. Para la multiplicación es el 1 y para la suma es el 0.

a · 1 = a

a + 0 = a

  • Valor absoluto: todo entero negativo tiene un entero positivo idéntico, pero sin el signo. Esto también se aplica a los enteros positivos, pero el valor absoluto de un positivo es el mismo positivo.

|-a| = a

|a| = a

Si quieres aprender en mayor detalle estas propiedades, te recomendamos que te mires nuestro artículo sobre las propiedades matemáticas de las operaciones.

Operaciones con los números enteros

Ahora ya conoces, las características del conjunto Z (entero), cuál es su orden y las propiedades de este conjunto para resolver operaciones. Por lo tanto, ya podemos hablar sobre las operaciones en sí.

  • La suma de enteros: si estamos sumando dos enteros del mismo signo, sencillamente sumamos sus valores absolutos y añadimos el signo delante. Mientras que, si estamos sumando un positivo y un negativo, tenemos que restar sus valores absolutos y escribir el signo del entero con mayor valor absoluto:

4 + 5 = 9

(-4) + (-5) = -9

4 + (-5) = -1

  • La resta de enteros: cuando restamos dos enteros, debemos aplicar la ley de los signos. Puesto que nos permite simplificar las sustracciones que tienen más de un signo seguido. Y así las convertimos en sumas, que ya sabemos resolver (explicado en el apartado anterior). En la siguiente tabla queda explicada la ley de los signos:

(+) · (+) = (+)

(+) · (-) = (-)

(-) · (+) = (-)

(-) · (-) = (+)

A continuación, te planteamos todos los casos que podemos encontrarnos:

4 – 5 = 4 + (-5) = -1

5 – 4 = 5 + (-4) = 1

(-4) – 5 = (-4) + (-5) = -9

4 – (-5) = 4 + 5 = 9

(-4) – (-5) = (-4) + 5 = 1

(-5) – (-4) = (-5) + 4 = -1

  • La multiplicación de enteros: para resolver multiplicaciones de enteros, sencillamente tenemos que multiplicar los valores absolutos. Y después, añadir el signo correspondiente, mediante la ley de los signos, la cual está explicada más arriba. Ahora te mostramos los cuatro casos que existen de multiplicaciones:

4 · 5 = 20

(-4) · 5 = -20

4 · (-5) = -20

(-4) · (-5) = 20

  • La división de enteros: por último, tenemos las divisiones, para resolverlas tenemos que hacer el cociente de los valores absolutos y añadir el signo, en función de la ley de los signos. Seguidamente, te mostramos los cuatro casos que puedes encontrarte:

20 ÷ 5 = 4

(-20) ÷ 5 = -4

20 ÷ (-5)  = -4

(-20) ÷ (-5) = 4

¿Cómo se usa el conjunto de los números enteros en la vida diaria?

El conjunto de los números enteros se utiliza en la vida diaria de muchas maneras. Por ejemplo, cuando se trata de medir algo, generalmente se usan números enteros, concretamente enteros positivos.

También se emplean para hacer cálculos matemáticos básicos, como la suma, la resta, la multiplicación y la división. Lo cual se aplica a cualquier acción cotidiana que hacemos, como: comprar, calcular el cambio, medir la distancia de un trayecto, seguimiento del tiempo…

Otras formas en que se pueden utilizar los números enteros en la vida diaria incluyen el ordenamiento de objetos (por ejemplo, colocando libros en un estante por orden alfabético) y el rastreo de ubicaciones (por ejemplo, encontrando un edificio en un mapa). En conclusión, prácticamente cualquier cosa que haces, está rodeada de valores enteros.

Los números ordinales y números cardinales

En esta lección, aprenderás los números ordinales y los números cardinales en español. Definiremos ambos conceptos, te mostraremos ejemplos de cada uno y te explicaremos cómo se escriben. Además, te enseñaremos dos tablas con los cien primeros números de cada grupo.

Definición de los números ordinales

Los números ordinales se usan para indicar el orden o posición de algo. Por ejemplo, «primero», «segundo», «tercero». Este tipo de números no los utilizamos en operaciones matemáticas. Sin embargo, sí que son muy comunes en prácticamente todos los ámbitos de la vida cotidiana.

Cabe destacar que existen tantos números ordinales como números naturales, puesto que cada valor del conjunto natural tiene su número ordinal asociado.

¿Cómo escribir los números ordinales?

Hay dos modos de escribir números ordinales, la primera forma es mediante los símbolos numéricos. De esta manera, para indicar «primero», debemos escribir 1º. Y así con todos los números: «segundo» se escribe 2º, «quinto» es 5º y así… Y añadimos la terminación -º/-ª.

Estas terminaciones varían según el género del sustantivo al que se refieren (masculino o femenino):

  • Masculino: -º: (el primer libro, el segundo día).
  • Femenino: -ª: (la primera clase, la segunda opción).

En cambio, si queremos escribir este tipo de números en palabras, se debe emplear una notación específica. La cual se debe memorizar, puesto que no sigue una lógica determinada. Es más bien la suma de diferentes normas y sufijos (no muy bien establecidos), que han resultado de la evolución de la lengua.

Además, también existe otra clasificación según el tipo de número. En primera instancia podemos encontrarnos con los números ordinales simples, los cuales se corresponden a los números que van del 1 al 10. También, se incluyen las decenas (20, 30, etc.): vigésimo, trigésimo… y las centenas (100, 200, etc.): centésimo, ducentésimo…

En segundo lugar, están los números ordinales compuestos, los cuales se forman por la unión de los ordinales simples. Por ejemplo, el 24º se escribe vigésimo cuarto. Lo cual es la suma de vigésimo (20) y cuarto (4).

¿Cuáles son los números ordinales del 1 al 100?

A continuación, te mostramos una lista con los 100 primeros números ordinales. Para que veas más ejemplos de la escritura de estos valores. Y al final de esta lista, te explicamos cómo se escriben los números ordinales mayores de cien.

1º – 1ªPrimero/a
2º – 2ªSegundo/a
3º – 3ªTercero/a
4º – 4ªCuarto/a
5º -5ªQuinto/a
6º – 6ªSexto/a
7º – 7ªSéptimo/a
8º – 8ªOctavo/a
9º – 9ªNoveno/a
10º – 10ªDécimo/a
11º – 11ªUndécimo/a
12º – 12ªDuoécimo/a
13º – 13ªDécimo/a tercero/a
14º – 14ªDécimo/a cuarto/a
15º – 15ªDécimo/a quinto/a
16º – 16ªDécimo/a sexto/a
17º – 17ªDécimo/a séptimo/a
18º – 18ªDécimo/a octavo/a
19º – 19ªDécimo/a noveno/a
20º – 20ªVigésimo/a
21º – 21ªVigésimo/a primero/a
22º – 22ªVigésimo/a segundo/a
23º – 23ªVigésimo/a tercero/a
24º – 24ªVigésimo/a cuarto/a
25º – 25ªVigésimo/a quinto/a
26º – 26ªVigésimo/a sexto/a
27º – 27ªVigésimo/a séptimo/a
28º – 28ªVigésimo/a octavo/a
29º – 29ªVigésimo/a noveno/a
30º – 30ªTrigésimo/a
31º – 31ªTrigésimo/a primero/a
32º – 32ªTrigésimo/a segundo/a
33º – 33ªTrigésimo/a tercero/a
34º – 34ªTrigésimo/a cuarto/a
35º – 35ªTrigésimo/a quinto/a
36º – 36ªTrigésimo/a sexto/a
37º – 37ªTrigésimo/a séptimo/a
38º – 38ªTrigésimo/a octavo/a
39º – 39ªTrigésimo/a noveno/a
40º – 40ªCuadragésimo/a
41º – 41ªCuadragésimo/a primero/a
42º – 42ªCuadragésimo/a segundo/a
43º – 43ªCuadragésimo/a tercero/a
44º – 44ªCuadragésimo/a cuarto/a
45º – 45ªCuadragésimo/a quinto/a
46º – 46ªCuadragésimo/a sexto/a
47º – 47ªCuadragésimo/a séptimo/a
48º – 48ªCuadragésimo/a octavo/a
49º – 49ªCuadragésimo/a noveno/a
50º -50ªQuincuagésimo/a
51º – 51ªQuincuagésimo/a primero/a
52º – 52ªQuincuagésimo/a segundo/a
53º – 53ªQuincuagésimo/a tercero/a
54º – 54ªQuincuagésimo/a cuarto/a
55º – 55ªQuincuagésimo/a quinto/a
56º – 56ªQuincuagésimo/a sexto/a
57º – 57ªQuincuagésimo/a séptimo/a
58º – 58ªQuincuagésimo/a octavo/a
59º – 59ªQuincuagésimo/a noveno/a
60º – 60ªSexagésimo/a
61º – 61ªSexagésimo/a primero/a
62º – 62ªSexagésimo/a segundo/a
63º – 63ªSexagésimo/a tercero/a
64º – 64ªSexagésimo/a cuarto/a
65º – 65ªSexagésimo/a quinto/a
66º – 66ªSexagésimo/a sexto/a
67º – 67ªSexagésimo/a séptimo/a
68º – 68ªSexagésimo/a octavo/a
69º – 69ªSexagésimo/a noveno/a
70º – 70ªSeptuagésimo/a
71º – 71ªSeptuagésimo/a primero/a
72º – 72ªSeptuagésimo/a segundo/a
73º – 73ªSeptuagésimo/a tercero/a
74º – 74ªSeptuagésimo/a cuarto/a
75º – 75ªSeptuagésimo/a quinto/a
76º – 76ªSeptuagésimo/a sexto/a
77º – 77ªSeptuagésimo/a séptimo/a
78º – 78ªSeptuagésimo/a octavo/a
79º – 79ªSeptuagésimo/a noveno/a
80º – 80ªOctogésimo/a
81º – 81ªOctogésimo/a primero/a
82º – 82ªOctogésimo/a segundo/a
83º – 83ªOctogésimo/a tercero/a
84º – 84ªOctogésimo/a cuarto/a
85º – 85ªOctogésimo/a quinto/a
86º – 86ªOctogésimo/a sexto/a
87º – 87ªOctogésimo/a séptimo/a
88º – 88ªOctogésimo/a octavo/a
89º – 89ªOctogésimo/a noveno/a
90º – 90ªNonagésimo/a
91º – 91ªNonagésimo/a primero/a
92º – 92ªNonagésimo/a segundo/a
93º – 93ªNonagésimo/a tercero/a
94º – 94ªNonagésimo/a cuarto/a
95º – 95ªNonagésimo/a quinto/a
96º – 96ªNonagésimo/a sexto/a
97º – 97ªNonagésimo/a séptimo/a
98º – 98ªNonagésimo/a octavo/a
99º – 99ªNonagésimo/a noveno/a
100º – 100ªCentésimo/a

En cuanto a los números ordinales superiores a cien, hay algunas nomenclaturas que debes conocer:

  • 100º se llama centésimo (centésima en femenino).
  • 200º se llama ducentésimo (ducentésima en femenino).
  • 300º tricentésimo (tricentésima en femenino).
  • 400º cuadrigentésimo (cuadrigentésima en femenino).
  • 500º quingentésimo (quingentésima en femenino).
  • 600º sexcentésimo (sexcentésima en femenino).
  • 700º septingentésimo (septingentésima en femenino).
  • 800º octingentésimo (octingentésima en femenino).
  • 900º noningentésimo (noningentésima en femenino).
  • 1000º milésimo (milésima en femenino).

Definición de los números cardinales

Los números cardinales se utilizan para contar. Son los números 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10 y así sucesivamente. Se puede decir que el conjunto de números naturales es equivalente al de los números cardinales.

¿Cómo escribir los números cardinales?

Los números cardinales se usan para contar. Se escriben igual que los naturales. Del uno al diez se llaman de la siguiente manera: uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve, diez.

Después del diez viene el veinte (20), el treinta (30), el cuarenta (40), el cincuenta (50), el sesenta (60), el setenta (70), el ochenta (80) y el noventa (90). Por último están los cien (100), los 200, 300, 400, 500, 600, 700, 800, 900 y así sucesivamente hasta llegar al billón que es 1.000.000.000.000.

En resumen, se escriben como los números que conoces de toda la vida.

¿Cuáles son los números cardinales del 1 al 100?

Seguidamente, te mostramos los números cardinales del 1 al 100:

1Uno
2Dos
3Tres
4Cuatro
5Cinco
6Seis
7Siete
8Ocho
9Nueve
10Diez
11Once
12Doce
13Trece
14Catorce
15Quince
16Dieciséis
17Diecisiete
18Dieciocho
19Diecinueve
20Veinte
21Veintiuno
22Veintidós
23Veintitrés
24Veinticuatro
25Veinticinco
26Veintiséis
27Veintisiete
28Veintiocho
29Veintinueve
30Treinta
31Treinta y uno
32Treinta y dos
33Treinta y tres
34Treinta y cuatro
35Treinta y cinco
36Treinta y seis
37Treinta y siete
38Treinta y ocho
39Treinta y nueve
40Cuarenta
41Cuarenta y uno
42Cuarenta y dos
43Cuarenta y tres
44Cuarenta y cuatro
45Cuarenta y cinco
46Cuarenta y seis
47Cuarenta y siete
48Cuarenta y ocho
49Cuarenta y nueve
50Cincuenta
51Cincuenta y uno
52Cincuenta y dos
53Cincuenta y tres
54Cincuenta y cuatro
55Cincuenta y cinco
56Cincuenta y seis
57Cincuenta y siete
58Cincuenta y ocho
59Cincuenta y nueve
60Sesenta
61Sesenta y uno
62Sesenta y dos
63Sesenta y tres
64Sesenta y cuatro
65Sesenta y cinco
66Sesenta y seis
67Sesenta y siete
68Sesenta y ocho
69Sesenta y nueve
70Setenta
71Setenta y uno
72Setenta y dos
73Setenta y tres
74Setenta y cuatro
75Setenta y cinco
76Setenta y seis
77Setenta y siete
78Setenta y ocho
79Setenta y nueve
80Ochenta
81Ochenta y uno
82Ochenta y dos
83Ochenta y tres
84Ochenta y cuatro
85Ochenta y cinco
86Ochenta y seis
87Ochenta y siete
88Ochenta y ocho
89Ochenta y nueve
90Noventa
91Noventa y uno
92Noventa y dos
93Noventa y tres
94Noventa y cuatro
95Noventa y cinco
96Noventa y seis
97Noventa y siete
98Noventa y ocho
99Noventa y nueve
100Cien

Esperamos haberte ayudado a entender los números cardinales y ordinales, y también las diferencias que hay entre ambos. Si quieres preguntarnos algo relacionado con este tema, no dudes en dejarlo en los comentarios.

¿Qué es la lógica matemática?

La lógica teorética, simbólica o lógica matemática es justamente el estudio de la lógica por medio de la interpretación de símbolos. Tiene que ver con el uso de diversas técnicas que enlazan la lógica convencional con el razonamiento matemático. La investigación de este campo, ha sido determinante para el estudio de los principios de la matemática como tal.

La lógica matemática se relaciona con la cualidad que tenemos para trabajar y razonar en términos numéricos. Asimismo, se basa es la posibilidad de aplicar razonamiento matemático lógico en distintos contextos.

Sin embargo, cuando hablamos de este tipo de lógica, cabe destacar que va mucho más allá. Es decir, no solo tiene que ver con la capacidad numérica. Además de esto, la lógica en las matemáticas nos ayuda a comprender ciertas definiciones de mejor forma.

Adicionalmente, a determinar conexiones con base en la lógica de manera técnica y esquemática. Todas las personas tienen la posibilidad de usar lógica matemática en distintos ámbitos. No obstante, el nivel de capacidad tiene que ver con la estimulación que cada uno de estos reciba.

Como en casi cualquier actividad, la inteligencia lógico matemática también se entrena. La estimulación oportuna es clave para adentrarse en este mundo de la mejor manera posible.

¿Cuál es la importancia de la lógica matemática?

La lógica estudia el modo en que razonamos. Dicho de forma más simple se trata de una disciplina que define si un argumento tiene o no validez. Para esto, emplea ciertas técnicas y reglas.

La finalidad de la lógica matemática es el cuestionamiento de las conceptualizaciones matemáticas. Además, la discusión de las reglas deductivas que se aplican en la matemática. Gracias a esto, es posible constituir una matemática real desde el punto de vista lógico.

Con la matemática desarrollamos teoremas y suponemos respuestas que se usan en investigaciones. Por ejemplo, se utiliza para cálculos geométricos, de álgebra y en cualquier solución de problemas.

En líneas generales, la lógica forma parte de la cotidianeidad. La mayoría de actividades que llevamos a cabo necesitan de lógica matemática. Si pintas una pared, por ejemplo, hay un procedimiento lógico a seguir.

No es adecuado empezar a pintar sin haber preparado previamente la pintura. Además, se considera si quien pinta es derecho o zurdo. Estos factores lógicos simplifican el proceso. Esto funciona igual para todos. El desarrollo de pensamiento lógico matemático es fundamental para entender las matemáticas como tal.

Sobre todo, en edad temprana. Cuando un niño es estimulado en relación con la lógica matemática, tiene la capacidad de usar de forma casi espontánea los cálculos e hipótesis en distintos escenarios. Algunas de las razones por las cuales es necesario desarrollar la lógica matemática son las siguientes:

  • Desarrollo de la inteligencia y aspectos evolutivos del pensamiento.
  • Mayor probabilidad de solucionar conflictos en distintos escenarios de la cotidianeidad. Esto pues, resulta más simple generar pronósticos e hipótesis.
  • Permite establecer metas claras sobre la vida. Además, favorece la construcción de un plan de acción para alcanzar objetivos.
  • Suministra sentido y estructura al modo en que se llevan a cabo las cosas y la toma de decisiones.

La estimulación infantil de la lógica matemática permite que la inteligencia matemática se desarrolle de forma simple. Gracias a esto, el niño involucra en su vida diaria aspectos relacionados con la lógica.

¿Qué tipos de lógica matemática existen?

La lógica matemática está dividida en cuatro grandes grupos. El primero de estos se conoce como teoría de conjuntos. Seguidamente, tenemos la teoría de modelos y la teoría de la demostración. Por último, se encuentra la teoría de la computabilidad.

Tanto la teoría de modelos como la de demostración son el origen de la lógica matemática como se conoce en la actualidad. Por su parte, la teoría de conjunto debe su origen a la investigación del infinito que estuvo a cargo de Georg Cantor. De hecho, este tema trajo a lugar las investigaciones más relevantes en torno a la lógica matemática.

Gracias a lo anterior, es posible hablar en la actualidad de temas como la hipótesis del continuo, el axioma de elección y mucho más. La lógica matemática se vincula en gran medida con la computación. De hecho, la teoría de la computabilidad expresa la computación de una manera matemática.

Actualmente, esta teoría se hace cargo del análisis de problemas complejos. Es decir, en la proposición de si realmente un problema tiene solución razonable o no. La lógica matemática analiza también la conceptualización de elementos matemáticos y nociones como números, algoritmos y conjuntos.

  • Teoría de modelos: en términos matemáticos, esta teoría se enfoca en el análisis de estructuras matemáticas como grafos con respecto a la lógica matemática. La teoría de modelos interpreta semánticamente cualquier tipo de expresión formal. Por otra parte, ayuda con el estudio de los axiomas.
  • Teoría de computabilidad: esta teoría estudia las complejidades en la toma de decisiones que tienen resolución por medio de algoritmos. Dicho en palabras simples, esta teoría estudia la computación desde la perspectiva matemática.
  • Teoría de conjuntos: también forma parte de la lógica matemática y analiza el nexo entre los conjuntos, así como también, las propiedades de los mismos. Esta teoría es capaz de elaborar estructuras importantes en el ámbito de la matemática. Por ejemplo, construye funciones, números y figuras geométricas.
  • Teoría de demostración: esta teoría, usa la demostración como una estructura matemática. Gracias a esto, es mucho más sencillo el estudio de las mismas por medio de técnicas matemáticas. La teoría de demostración se hace cargo de la sintaxis con respecto a la teoría de modelos.

¿Cuáles son las características de la inteligencia lógico matemática?

  • La matemática y la lógica no siempre coinciden en el mismo punto. Es decir, alguna de las dos puede ser superior o inferior en un momento dado.
  • La lógica y la matemática se relacionan con aspectos del pensamiento lógico como la capacidad para argumentar, la capacidad de deducción y argumentativa. Además, se enlazan con aspectos propios de la matemática, tanto en simbología como en capacidad numérica. Todo esto para solucionar problemas de manera lógica.
  • La manera en que las personas aprenden la lógica matemática tiene que ver con el uso de sus cualidades. Es decir, la capacidad para resolver problemas matemáticos, utilizar objetos abstractos, justificar un argumento de forma lógica…
  • El aprendizaje de la lógica matemática surge en la infancia. En tal sentido, las primeras señales del pensamiento lógico matemático se evidencian a temprana edad. Las mismas avanzan con el crecimiento y la estimulación. Las capacidades suelen mejorar a medida que usamos nociones cada vez más complicadas.

¿Qué fundamentos algebraicos se aplican en la lógica matemática?

Gran parte de la lógica matemática se relaciona con la utilización de fundamentos algebraicos para estudiar objetos lógicos. Estos aspectos son las proposiciones y las clases. Por un lado, la proposición se refiere al sentido razonable. Sin embargo, por otro lado, supone la verdad (V) o mentira (M).

Una proposición se trata de una expresión que puede ser mentira o verdad, pero nunca puede ser las dos al mismo tiempo. En tal sentido, las proposiciones «2 x 2= 4» y «3 x 3 = 9» demuestran un sentido distinto. Sin embargo, las dos establecen una verdad (V).

El álgebra en la lógica matemática analiza las proposiciones solo desde lo que significan. No obstante, hay un aspecto particular. Solo se consideran semejantes las que tienen el mismo significado de verdad.

El álgebra lógica usa el simbolismo lógico. Adicionalmente, a los símbolos de las proposiciones, se utiliza simbología para las operaciones. Es decir, en el caso de implicaciones, conjunciones, negaciones, entre otras. Con ello, el álgebra de la lógica matemática constituye expresiones teniendo otras como referencia.

Se considera que una expresión está compuesta cuando nace de la combinación de operaciones lógicas de álgebra. En caso opuesto, se considera simple. Para entender mejor, tenemos algunos ejemplos de proposiciones válidas y no válidas.

s: la tierra es redonda.

f: 15 + 10 = 50

t: Brasil ganará el mundial Qatar 2022

u: Hola, ¿Cómo estás?

v: apaga la luz por favor

Los ejemplos s y f pueden ser verdad o mentira. Por ello, se consideran proposiciones válidas. La proposición t se expresa correctamente. Sin embargo, para confirmar si es verdadera o falsa, hay que esperar que termine el Mundial de fútbol (al menos a la fecha de publicación de este artículo). No obstante, las proposiciones u y v no son válidas.

El motivo de esto, es que no pueden ser verdaderas o falsas. La primera expresión es solo un saludo y la segunda una indicación u orden.

¿Cómo se utiliza la lógica matemática en la cotidianeidad?

Las matemáticas están en todas las actividades que llevamos a cabo. Son útiles en muchos aspectos de la vida. Cuando se trata de lógica matemática, hay distintos modos de aplicarla. Por ejemplo, en el manejo del presupuesto familiar, en la realización de actividades deportivas, en las compras, en la preparación de recetas y mucho más.

¿Cómo estimular la lógica matemática en los niños?

Como bien destacamos antes, la estimulación temprana es fundamental para un buen desarrollo del pensamiento lógico matemático. Sin embargo, es importante que cada etapa de aprendizaje se realice en función de las capacidades del niño. Así como también, en base a su edad. En tal sentido, hay ciertos parámetros claves a seguir como, por ejemplo:

  1. Incentivar en los niños y niñas la interacción con diversos objetos que estimulen la lógica matemática. Sin duda, este aspecto permite que cada niño descubra los atributos de cada objeto. Además, analice por cuenta propia sus diferencias y similitudes. Este proceso favorece el razonamiento espontáneo.
  2. Clasificar los objetos según sus tipos y características por medio de actividades. Seriar objetos iguales o distintos es de gran ayuda para establecer patrones de forma lógica. Por ejemplo, ubicar en un mismo lugar cubos de un color en específico.
  3. Mostrar la reacción de ciertas cosas es situaciones comunes. Es decir, permitir al niño experimentar los cambios que un elemento u objeto determinado tiene ante una acción. Para entender mejor, es posible tomar como ejemplo el punto de ebullición de agua cuando se hierve.
  4. Encontrar espacios idóneos para estimular la concentración. Además de experimentar, el niño necesita estar en un ambiente que le permita observar y concentrarse. Solo de esta forma es posible conseguir el pensamiento lógico matemático.
  5. Usar juegos que necesiten de lógica matemática. La elección de los juguetes es fundamental en este punto. Lo más recomendable es utilizar juguetes de estimulación como adivinanzas, memoria, sudokus, juego de cartas, dominó, entre otros.

¿Cuándo nace la lógica matemática?

La lógica matemática tiene una historia evolutiva bastante interesante. A decir verdad, desde el año 6.000 a.C hasta el año 300 a.C ya se hablaba de la matemática de manera formal. Sin embargo, en la Edad Media fue cuando realmente logró imponerse ante la religión.

Los actores más importantes que marcaron el inicio de la lógica matemática fueron Aristóteles, Euclides y Platón.

Ahora bien, por primera vez en la historia el cálculo lógico se dio a conocer gracias a Leibniz. No obstante, como una disciplina única, la lógica matemática, se estructuró a mitad del siglo XIX. Esto fue posible gracias al trabajo de investigación de Boole. A partir de este momento, empieza lo que se conoce como álgebra de la lógica.

Otro factor que tuvo que ver con el surgimiento de la lógica matemática, se ubica al terminar el siglo XIX debido a la necesidad de la matemática en relación con la argumentación de sus conceptualizaciones y formas demostrativas. En las fuentes más importantes están las investigaciones de Frege.

Para aquella época, se definen los sistemas lógicos primordiales de la lógica de la matemática actual. Estos son el cálculo del predicado y el cálculo del enunciado. Ambos, como bien expresamos antes, determinan el estado actual de la lógica matemática.

La etapa que sigue a las investigaciones, se asocia más con los distintos tipos de cálculos lingüísticos, la relación con aspectos semánticos y, en líneas generales, con todo lo vinculado con la metalógica.

¿Qué es la teoría de conjuntos?

La teoría de conjuntos es uno de los cuatro elementos de la lógica matemática. Dicha teoría analiza la agrupación de elementos estudiando sus cualidades y las conexiones entre los objetos que constituyen el conjunto.

Cuando hablamos de conjuntos, en esta teoría, nos referimos a grupos abstractos de estructuras que tienen una característica semejante. En esta teoría se efectúan operaciones como intersección, complemento, diferencia y unión con los objetos que crean el conjunto como tal.

Dicho de un modo más simple, la teoría de conjuntos es una rama de la matemática basada en el conjunto. Por ello, evalúa todas las propiedades que tiene cada elemento, así como las conexiones que se producen entre los mismos.

Como bien hemos explicado antes, los conjuntos no son más que grupos de objetos. Es decir, pueden tratarse de símbolos, palabras, números, figuras geométricas, letras, entre otros.

¿Qué tipos de conjuntos existen?

De acuerdo con la cantidad de objetos que contenga un conjunto, se clasifican de distintas formas. Estas son las siguientes:

  • Conjuntos finitos: son todos aquellos que tienen una cantidad común de elementos. Por ejemplo, el conjunto de días de la semana, el conjunto de letras vocales, entre otros.
  • Conjuntos infinitos: contienen una cantidad infinita de objetos. Por ejemplo, los números reales.
  • Conjunto universal: agrupa a todos los objetos tenidos en consideración en un caso particular. Por ejemplo, si se quiere usar el conjunto numérico de un dado, el conjunto universal es U = {1, 2, 3, 4, 5, 6}.
  • Conjunto vacío: es el conjunto que no cuenta con elementos. Por ejemplo, el conjunto de meses del año que tienes 27 días.

¿Cuáles son los métodos para definir un conjunto?

Para definir un conjunto, se establece, en primera instancia, un aspecto común de los elementos del grupo. Por ejemplo, un primer conjunto que tiene números enteros positivos, pares menores a 20. Esto se vería de la siguiente manera:

A= {2, 4, 6, 8, 10, 12, 14, 16, 18}.

A partir de ahí, para definir un conjunto se puede recurrir a dos métodos. El primero de ellos se conoce como método de numeración o extensión. Y el segundo, se denomina método de descripción. En el primero, se enlistan específicamente los elementos del conjunto, mientras que en el segundo, se parte de la propiedad que deben cumplir los elementos.

El primer sistema es muy útil para describir conjuntos que contienen pocos elementos, a continuación te mostramos un par de ejemplos:

Lanzar dados comunes M= {1, 2, 3, 4, 5, 6} (Finito).

Las vocales que están en el alfabeto G= {a, e, i, o, u} (Finito).

Mientras que el segundo método es más práctico para definir conjuntos con una gran cantidad de elementos, o conjuntos infinitos. Seguidamente, te enseñamos un par de ejemplos:

Todos los números naturales menores que 32 S = {x ∈ ℕ | x < 32} (Finito).

Todos los números naturales N = {x ∈ ℕ} (Infinito).

¿Qué son los conjuntos numéricos?

Básicamente, se conocen como conjuntos numéricos a la categorización en la que se ubican los números. Esto en relación con las características de cada uno de ellos. Es decir, si por ejemplo un número cuenta con decimales o si tiene un signo negativo.

Los conjuntos numéricos son todos y cada uno de los números con los que contamos para llevar a cabo distintas operaciones matemáticas. Esto se aplica tanto en el ámbito cotidiano como en escenarios más complejos como la ciencia o la ingeniería.

Estos conjuntos surgen a partir de creaciones de la mente humana. Por ello, se constituyen dentro de lo abstracto. Dicho de otra forma, los conjuntos numéricos no existen en términos materiales. Los conjuntos numéricos se dividen a su vez en varios tipos de números.

  • Números naturales: son los que todos usamos para contar. Se prolongan hasta el infinito y toman fracciones pequeñas de una unidad. Formalmente, el conjunto de números naturales es expresado con la letra N y del siguiente modo: ℕ = {1, 2, 3 …} = ℕ \ {0}
  • Números enteros: estos números abarcan los números naturales. Además, todos los números que ocupan fracciones circunspectas, pero que poseen un signo negativo delante. Asimismo, se añade el cero también. Se pueden expresar del siguiente modo: ℤ = {…, -7, -6, -5, -4, -3, -2, -1, 0, 1, 2, 3, 4, 5, 6, …}. En este conjunto, cada uno de los números tiene su equivalente con el signo opuesto. Es decir, el opuesto del 8 es – 8.
  • Números racionales: los números racionales abarcan los números que se expresan como cociente de dos números enteros y a todos los números enteros. Esto quiere decir que pueden tener un número decimal sin problema alguno. Este conjunto se podría expresar de la siguiente manera: ℚ = ℤ/ℤ.
  • Números irracionales: estos números no se expresan como cociente de dos números enteros. Además, no se especifican en una sección periódica que se prolonga, pese a que se extienden infinitamente. Es necesario tener claro que los números irracionales y los racionales, forman parte de conjuntos diferentes. Por ello, no tienen una característica común. Un ejemplo de número irracional es: √123. 11.0905365064.
  • Números reales: estos números agrupan a los números racionales y a los irracionales. Esto quiere decir que este grupo abarca números desde el menos infinito hasta el infinito.
  • Números imaginarios: estos números se obtienen como resultado de la multiplicación de la unidad imaginaria por cualquier número real. La unidad imaginaria se traduce en la raíz cuadrada de – 1. Estos números no tienen relación alguna con los números reales. Se expresan de la siguiente forma: p= r * s. En este caso: p es un número imaginario, r es un número real y s es la unidad imaginaria.
  • Números complejos: los números complejos incluyen una parte imaginaria y otra parte real. Su estructura se expresa de la siguiente manera: v + ri. En este caso: v es un número real, r es la parte imaginaria, i es la unidad imaginaria

¿Qué es la unión de conjuntos?

Se puede considerar, que la unión de conjuntos no es más que una operación binaria que se realiza en el conjunto de todos los conjuntos internos de un U. Entiéndase por operación binaria a aquella que depende del operador y de dos argumentos para que haya un cálculo en particular.

En tal sentido, a cada par de conjuntos A y B que forman parte de U se les asocia otro conjunto (A U B) de U. Por ello, si A y B son dos conjuntos separados, la unión de conjuntos se expresa del siguiente modo: A= {Luis, Carlos}, B={Carla, Luisa, Paola}; AUB={ Luis, Carlos, Carla, Luisa, Paola}.

¿Qué es la intersección de conjuntos?

La intersección de conjuntos se trata de una operación que deriva en otro conjunto con objetos repetidos o frecuentes a los conjuntos originales. En el caso de que ocurra una intersección de conjuntos vacía, se define como disjuntos. En este caso, se expresa de la siguiente forma: S ∩ D = Ø.

El símbolo ∩ en esta operación responde a la intersección. Para entender mejor, veamos el siguiente ejemplo:

M= {Verde, negro, blanco, morado}.

J = {Negro, verde, rosado, azul}.

En este caso: M ∩ J = {verde, negro} debido a que son los objetos que se repiten en los dos conjuntos iniciales.

¿Qué es la diferencia de conjuntos?

La diferencia de conjuntos es la tercera operación que forma parte de la teoría de conjuntos. Se define como la operación que hace posible la obtención de un conjunto nuevo a partir de los objetos de A que no estén contenidos en B. Por ejemplo:

A = {4, 6, 8, 10, 12, 14}.

B = {2, 4, 6, 8}.

Entonces, la diferencia de conjuntos se obtiene de los elementos que forman parte del conjunto A, pero no del B. Esto se traduce en {10, 12, 14}.

¿Qué es el complemento de un conjunto?

Se define como complemento de un conjunto a todos los objetos del U que no forman parte del conjunto. Es decir, se trata de un conjunto que tiene elementos que no constituyen al conjunto original. Para entender mejor este concepto, es fundamental saber los objetos que se usan, o de otra manera el tipo de conjunto universal.

Es decir, si por ejemplo estamos hablando de números primos, el conjunto complementario es el de los números no primos. Al mismo tiempo, el conjunto de números primos es el complemento de los números no primos.

¿Qué es la diferencia simétrica entre los conjuntos?

La diferencia simétrica de los conjuntos es un conjunto cuyos objetos forman parte de un conjunto inicial, sin tener nada que ver con los otros dos conjuntos al mismo tiempo. Si ejemplificamos esta operación de la teoría de conjuntos tenemos lo siguiente:

{1, 2, 3} y {2, 3, 4, 6, 9, 8} = la diferencia simétrica sería {1, 4, 6, 9, 8}.

¿Qué es el diagrama de Venn?

Los gráficos que forman parte del diagrama de Venn, son todos aquellos expresados por una línea continúa cerrada. Es decir, óvalos, triángulos, círculos, entre otros. Por lo general, el conjunto universal se expresa como rectángulo. El resto de conjuntos se expresan geométricamente con círculos u óvalos.

Es importante tener presente que este diagrama no supone una evidencia matemática. No obstante, es útil para intuir sobre el nexo que hay entre un conjunto determinado y otro.

¿Dónde se aplica la teoría de conjuntos?

Los campos de aplicación de la teoría de conjuntos son muchísimos. Se usa principalmente en la formulación de bases lógicas geométricas. Sin embargo, tiene otras aplicaciones como la topología. En líneas generales, esta teoría es relevante en la ciencia, la matemática, la física, la biología, la química y hasta la ingeniería.

Para entender mejor la lógica matemática, es esencial conocer bien este elemento de la misma, la teoría de conjuntos es una de las más importantes. Además, no solo tiene aplicación dentro de la matemática, como bien hemos expuesto antes.

¿Cómo se habla de la teoría de conjuntos en el lenguaje común?

La teoría de conjuntos es parte fundamental de la matemática. Sin embargo, también tiene que ver con ámbitos más cotidianos que operacionales. Es decir, no siempre se trata de conjuntos numéricos. En el lenguaje tradicional, referirse a un conjunto resulta un tanto más complejo.

El motivo de esto es que, si deseamos constituir un conjunto de los pintores más destacados, por ejemplo, las percepciones serán variadas. Por ello, el consenso es prácticamente imposible. En resumen, no es tan sencillo determinar quiénes están o no en el grupo en función de sus cualidades.

Algunos de estos conjuntos particulares son los que se definen como conjuntos vacíos o que no tienen elementos. También, podríamos estar en presencia de conjuntos de un solo elemento o unitarios.

¿Cuál es la historia de la teoría de conjuntos?

La teoría de conjuntos surge debido a las investigaciones del alemán Georg Cantor. Este personaje fue un reconocido matemático. De hecho, hasta la fecha se le conoce como el padre de esta teoría. Entre las investigaciones más relevantes del investigador se encuentran los conjuntos numéricos e infinitos.

La primera investigación de Cantor relacionada con la teoría de conjuntos se ubica en el año 1874. Adicionalmente, es importante mencionar que su trabajo se mantuvo relacionado con las investigaciones de Richard Dedekind, un importante matemático de la época. Incluso, este último, tuvo un rol fundamental en la investigación de los números naturales.

¿Qué importancia tiene la teoría de conjuntos?

El estudio de esta teoría es esencial para el análisis de la probabilidad, la matemática en todo lo que respecta a ella y la estadística. Cada una de las operaciones que forman parte de esta teoría se usan para efectuar experimentos a fin de obtener un resultado específico.

Las respuestas siempre tienen que ver con las circunstancias en que se lleva a cabo el experimento. Por ello, los conjuntos juegan un papel fundamental en este tipo de investigaciones.

¿Qué son los números primos?

En este artículo trataremos los números primos y los números compuestos, los cuales son dos conjuntos numéricos contrarios.

¿Cuál es la definición de un número primo?

Los números primos son un conjunto numérico que describe los valores numéricos que solo tienen dos divisores: el número 1 y ellos mismos. Por ejemplo, el 2 es un número primo, ya que solo tiene divisores el 1 y el 2. Sin embargo, el 4 no es un número primo, porque además del 1 y del 4, también tiene como divisor al 2. Entonces, el cuatro es un número compuesto.

Por lo tanto, si intentamos dividir un número primo entre cualquier otro número que no sean el uno y él mismo, no nos saldrá un número natural. Un ejemplo es el número 7, el cual solo se puede dividir en partes iguales entre 1 y 7. Para acabar de entender este concepto, es muy recomendable que pruebes de identificar los números primos comprendidos entre 1 y 10.

Existen ciertos patrones entre los números primos. Por ejemplo, los números primos pares, los números primos impares, los números primos. Y también hay otros tipos de números primos, los cuales los veremos más adelante cuando tratemos algunos teoremas que están relacionados con el conjunto numérico de los primos.

¿Cuáles son los números primos del 1 al 100?

A continuación, te mostramos una lista con los números primos comprendidos entre el 1 y el 100. De esta manera, viendo algunos ejemplos de números primos, acabarás de entender bien el concepto. En especial, te recomendamos que trates de identificar estos números por tu cuenta y después, compruebes si lo has hecho bien con el resultado que te proponemos:

2, 3, 5, 7, 11, 13, 17, 19, 23, 29, 31, 37, 41, 43, 47, 53, 59, 61, 67, 71, 73, 79, 83, 89 y 97.

¿Qué son los números no primos?

Los números no primos, también conocidos como números compuestos, son aquellos números que no pertenecen al conjunto de los números primos. Si ya sabemos que, un número primo es un número natural mayor que 1 que tiene únicamente dos divisores naturales, a saber, el 1 y él mismo. Entonces, un valor compuesto tiene más de dos divisores.

Por ejemplo, el número 15 es un número no primo, ya que está formado por la multiplicación de números primos (3 x 5). Dicho de otra manera, el número 15 puede dividirse entre 1, 3, 5 y 15, con lo cual no cumple la condición de los números primos.

Los números no primos son importantes en matemáticas y en diversas aplicaciones, como la criptografía. Además, los números no primos juegan un papel crucial en la teoría de números, puesto que se utilizan para demostrar diversos teoremas.

Por ejemplo, el teorema de Fermat se puede demostrar empleando números no primos. Este teorema establece que si un número es divisible por un número primo, entonces ese número también es divisible por todos los números primos que están por debajo de él. Aunque, ya entraremos en mayor detalle sobre este teorema más adelante.

¿Cómo se sabe que un número es primo?

Existen varios métodos para saber si un número pertenece al conjunto de los números primos o no. El más evidente es intentar dividir el valor en cuestión entre todos los valores más pequeños que él. Por ejemplo, si queremos saber si el 5 es un número primo, deberemos dividirlo entre 5, 4, 3, 2 y 1. El resultado nos da que solo se puede dividir entre 5 y 1, así que es un valor primo.

Otro método que podemos emplear es la factorización de números enteros, este es un método para encontrar los factores primos de un número. Así como, el número 21 puede factorizarse como 3 x 7, lo que significa que 3 y 7 son los factores primos del número 15. Y, por lo tanto, el 21 no es un número primo, porque tiene más de dos divisores: 1, 3, 7, 21.

Aunque, también tenemos otro método, algo más elaborado, el cual nos facilita mucho la tarea de identificar un número primo. Seguidamente, lo explicamos:

¿Qué es la criba de eratóstenes?

La criba de Eratóstenes es un método de obtención de números primos. Se llama así en honor a Eratóstenes, quien fue el primero en describirlo. Esta criba es un algoritmo de cribado muy eficiente y sigue siendo el método más utilizado para encontrar números primos.

La criba de Eratóstenes se basa en la idea de que si un número no es primo, entonces es divisible por algún número primo. Por ejemplo, si queremos saber si el número 6 es primo o no, podemos dividirlo por 2 (es un número primo) y 3 (también es un número primo) y vemos que 6 es divisible por ambos.

En general, si un número no es primo, entonces es divisible por algún número primo que esté entre 1 y él mismo. Eratóstenes se basa en esta idea para encontrar números primos.

  • Comienza por marcar todos los números como «no primos».
  • Luego, marca el número 2 como «primo» y elimina todos los números que sean divisibles por 2 (esto se conoce como «cribar por 2»).
  • Luego, marca el número 3 como «primo» y elimina todos los números que sean divisibles por 3.
  • Continúa de esta forma hasta que haya marcado todos los números primos hasta el número que se está buscando.
  • Al final, todos los números que no hayan sido marcados como «primos» son, de hecho, números primos.

Resulta ser un algoritmo de cribado muy eficiente. Por ejemplo, para encontrar todos los números primos hasta el número 100, solo se necesitan 9 pasos. La criba sigue siendo el método más utilizado para encontrar números primos.

¿Cómo se suman los números primos?

Aunque a primera vista pueda parecer que los números primos no tienen ninguna relación entre sí, de hecho se pueden sumar de forma muy sencilla. Para hacerlo, basta con seguir estos pasos:

  1. Escribe los números primos que quieras sumar en una fila.
  2. Encuentra el número primo más grande y anótalo en la parte superior de la fila.
  3. Encuentra el número primo más pequeño y anótalo en la parte inferior de la fila.
  4. Suma los dos números primos y anota el resultado en la parte superior de la fila.
  5. Repite los pasos 3 y 4 hasta que solamente te queden dos números primos en la fila.
  6. Finalmente, suma los dos últimos números primos y este será el resultado de la suma.

Así de sencillo. ¿Quieres ver un ejemplo? Sumaremos los números primos 5, 7 y 11. Según los pasos que acabamos de ver, el resultado será:

5 + 7 = 12

12 + 11 = 23

Como podemos ver, la suma de los números primos 5, 7 y 11 es 23. ¿Y qué pasa si queremos sumar números primos más grandes? Pues lo mismo, solo que tendremos que seguir los pasos un poco más de cerca. Por ejemplo, sumaremos los números primos 97, 101 y 103. El resultado será:

97 + 101 = 198

198 + 103 = 301

Así pues, la suma de los números primos 97, 101 y 103 es 301. En resumen, sumar números primos es muy sencillo si se siguen los pasos correctamente. ¿Por qué no intentas sumar algunos números primos tú mismo?

¿Cuál es el mayor número primo de dos dígitos?

Este es un buen problema para los matemáticos y para aquellos interesados en los números primos.

Los números primos también son interesantes desde el punto de vista de la teoría de los números. Hay una conjetura, todavía sin resolver, conocida como la conjetura de Goldbach, que dice que todo número par mayor que 2 puede ser escrito como la suma de dos números primos. Así que, ¿cuál es el mayor número primo de dos dígitos?

Aunque no hay una regla fija para determinar el mayor número primo de dos dígitos, se puede utilizar un enfoque similar al utilizado para encontrar el mayor número primo de un dígito. Como sabemos, los números primos de un dígito son 2, 3, 5, 7 y 9. Si utilizamos el mismo enfoque para los números de dos dígitos, podemos determinar los números primos de dos dígitos:

11,13, 17, 19, 23, 29, 31, 37, 41, 43, 47, 53, 59, 61, 67, 71, 73, 79, 83, 89, 97

¿Quién descubrió los números primos?

Los primeros números primos conocidos fueron descubiertos por los antiguos matemáticos griegos. A Euclides se le atribuye el mérito de ser el primero en demostrar que existen infinitos números primos. Su demostración se sigue enseñando hoy en día en las aulas de matemáticas. Aunque, no fue el único matemático que contribuyó a este descubrimiento.

El gran matemático indio Ramanujan también hizo importantes contribuciones al estudio de los números primos. A principios del siglo XX, desarrolló una nueva forma de encontrar números primos que era mucho más rápida que los métodos que se habían utilizado hasta entonces.

El trabajo de Ramanujan fue fundamental para el desarrollo del ordenador moderno. Sin sus aportaciones, los ordenadores no serían capaces de realizar las tareas que hacen hoy en día. Entonces, ¿quién descubrió exactamente los números primos? Se puede decir que fue un trabajo en equipo de algunas de las mentes más brillantes de la historia.

A continuación, te explicaremos dos teoremas que aportaron muchísimo al estudio de los números primos.

Teorema de Hadamard

Este problema parecía insoluble, pero en 1896, el matemático francés Jacques Hadamard demostró que, en realidad, es posible determinar si un número es primo o no con cierta probabilidad.

El teorema de Hadamard se basa en el análisis de la función matemática que determina si un número es primo o no. Esta función, llamada función primalidad, se puede representar gráficamente como una serie de puntos en una línea. La función o test de primalidad tiene la siguiente forma: P(x) = x/ln(x). Donde x es el número a analizar y ln(x) es el logaritmo natural de x.

La función se puede interpretar como la probabilidad de que un número dado, x, sea primo. Esto quiere decir que, cuando x es muy pequeño, la probabilidad de que sea primo es muy alta, ya que hay muy pocos números en total.

Sin embargo, cuando x es muy grande, la probabilidad de que sea primo es mucho menor. Porque, hay muchos más números y, por lo tanto, es más probable que uno de ellos no sea primo.

La función primalidad también se puede interpretar como la densidad de los números primos en función del tamaño de los números. Esto quiere decir que, cuando x es muy pequeño, la densidad de los números primos es muy alta, ya que hay muy pocos números en total.

Sin embargo, cuando x es muy grande, la densidad de los números primos es mucho menor, ya que hay muchos más números y, por tanto, es más probable que uno de ellos no sea primo.

El teorema de Hadamard establece que, para cualquier valor de x, la función primalidad tiene un valor mínimo en x = 2. Esto quiere decir que, si x es un número primo, entonces la probabilidad de que x sea primo es mayor que la probabilidad de que x + 2 sea primo.

De esta forma, el teorema de Hadamard permite determinar si un número dado es primo o no con cierta probabilidad. Si se analiza un número y se determina que su función primalidad es igual o mayor que la del número siguiente, entonces es más probable que el número analizado sea primo.

¿Qué expresa la teoría de fermat?

El teorema de Fermat afirma que no hay soluciones de números enteros para la ecuación an + bn = cn para n > 2.

Por lo tanto, si se sabe que un número es divisible por un número no primo, se puede deducir que ese número también es divisible por todos los números primos que están por debajo de él. El teorema de Fermat se utiliza en diversas aplicaciones, como la criptografía y la factorización de números enteros.

El teorema lleva el nombre de Pierre de Fermat, que propuso la idea por primera vez en 1637. Afirmó tener una prueba que era demasiado grande para caber en el margen del libro en el que estaba trabajando. La primera prueba completa no fue publicada hasta 1995, por Andrew Wiles.

En 1993, Wiles anunció que había demostrado por fin el último teorema de Fermat, que había desconcertado a los matemáticos durante más de 350 años. La prueba se publicó en 1995 en la revista Annals of Mathematics. Por su logro, Wiles recibió el Premio nobel 2016.

El teorema tiene importantes implicaciones para el estudio de los números enteros. Es un peldaño hacia el concepto más general del último teorema de Fermat, que afirma que no hay soluciones de números enteros distintos de cero para la ecuación an + bn = cn para n > 2.

Conclusión

Esperamos haberte ayudado a entender mejor los números primos. Si tienes cualquier duda respecto a este artículo, no dudes en dejárnosla en los comentarios y trataremos de ayudarte. Y si quieres seguir leyendo sobre las matemáticas y los números, te recomendamos nuestro artículo sobre los conjuntos numéricos.

Explicación sobre el polinomio ordenado

Un polinomio es una expresión algebraica que consiste en la suma de términos. Los términos se pueden separar en dos partes: el coeficiente y la incógnita. La incógnita está elevada a un exponente natural y a su vez, está multiplicada por el coeficiente. Estos términos deben ordenarse de una manera muy concreta, y esto es lo que explicaremos a continuación.

¿Qué es un polinomio ordenado?

Un polinomio ordenado es un polinomio que tiene una estructura ordenada según los grados de los distintos términos. Empezamos con el término de mayor grado (en la izquierda) y añadimos hacia la derecha los siguientes términos con el grado progresivamente menor. Si tienes un polinomio de grado 3, el orden ha de ser como el del ejemplo: 4x³ – 3x² + x – 5.

Si nos encontramos con un polinomio completo tenemos que ordenar los términos según el valor del grado. Y en el caso de tener un polinomio incompleto, seguimos el mismo procedimiento. Y si el término de grado dos no existe, simplemente pasamos al siguiente, sin tenerlo en cuenta. En el siguiente ejemplo, puedes verlo de una forma más clara: 2x³ – 4x + 1.

Te estarás preguntando es ¿De qué sirve tener un polinomio ordenado? Pues la verdad es que para la manipulación de polinomios es muy práctico. Ya que los puedes evaluar rápidamente mirándolos de izquierda a derecha. Por ejemplo, si tienes que simplificar u operar con expresiones de este estilo, es más cómodo tener los términos de grado común en el mismo lado.

Ejemplos de polinomios ordenados y polinomios desordenados

Los polinomios se pueden clasificar de muchas maneras, pero aquí nos centraremos en los polinomios ordenados y los desordenados. Tenemos que recordar que un polinomio está ordenado si sus términos están dispuestos en orden creciente de acuerdo con su grado. Por ejemplo, el polinomio x² + 3x – 5 está ordenado, ya que los grados están en orden creciente.

En contraste, un polinomio está desordenado si sus términos no están dispuestos en orden creciente de acuerdo con su grado. Por ejemplo, el polinomio 4x³ – 5x + 2x² + 7 no está ordenado porque sus términos no respetan la estructura que hemos explicado. Cabe destacar que, aunque solo haya un término fuera de su lugar, ya se considera como polinomio desordenado.

El orden de los términos de un polinomio

Ahora que ya sabes cómo ordenar un polinomio y por qué es tan práctico usar este concepto matemático en tus cálculos. Te recomendamos que lo apliques en tus sesiones de estudio. Quizás no hace falta que hagas ejercicios exclusivamente centrados en ordenar polinomios, porque es algo muy fácil de hacer.

Pero, lo que sí te recomendamos que hagas, es que cada vez que vayas a resolver alguna operación de polinomios. Aunque solo vayas a hacer una simplificación, antes de hacer nada, te preguntes si está cada término en su sitio o si hace falta hacer algún cambio. Después, ya podrás empezar a resolver los cálculos de una manera correcta y práctica.

Dicho esto, si te ha quedado alguna pregunta sobre los polinomios ordenados. No dudes en preguntarnos a través de los comentarios.

Explicación sobre el polinomio completo

En este artículo, repasaremos los conceptos necesarios para comprender qué es un polinomio completo. También, aprenderemos cómo se utiliza y por qué es una idea tan importante para la manipulación y cuantificación de polinomios. Aunque, antes que nada, es muy recomendable que te leas nuestra publicación sobre el polinomio.

¿Qué es un polinomio completo?

Un polinomio completo es una expresión algebraica que consta de una suma de términos. Cada término está formado por la multiplicación de un número, llamado coeficiente, por una potencia de x. La potencia más alta en el polinomio se denomina grado del polinomio y la más baja (x elevado a cero) se llama término independiente.

A partir de esto, definimos un polinomio completo como aquel que incluye términos de todos los grados posibles hasta el grado del polinomio. En otras palabras, si un polinomio tiene un grado de 5, entonces debe incluir términos de grado 5, 4, 3, 2, 1 y 0. Dicho de otra manera, un polinomio completo es aquel que no tiene ningún término nulo (igual a cero).

En la imagen siguiente, puedes visualizar un ejemplo de esto. Tal como se puede apreciar, tiene un término para cada exponente de x, desde x elevado a la cuatro (siendo cuatro el grado del polinomio) hasta x elevado a la cero, en el término independiente. Con lo cual, este polinomio cumple con la definición de polinomio completo.

Ejemplo polinomio completo

En cambio, si tenemos otro polinomio tal como el de la próxima imagen, estaremos tratando con un polinomio incompleto. Puesto que le faltan dos términos, el de x elevado a la dos y el término independiente. Y partiendo de la definición de polinomio completo, si falta aunque sea un solo término, el polinomio deja de ser completo.

Polinomios completos e incompletos

Ejemplos de polinomios completos

Ahora que ya conoces la definición del polinomio completo, vamos a ver algunos ejemplos reales. Empezaremos por ver un polinomio completo de grado 2, otro de grado 4 y por último, uno de grado 6. Evidentemente, podríamos plantear ejemplos de grados mucho mayores, pero la idea es la misma con todos los tipos de polinomios.

Grado de un polinomio completo

Con estos ejemplos queda muy clara la definición de polinomios completos. Es por eso que ahora ya podemos pasar al siguiente nivel. En el próximo apartado te detallaremos los dos tipos de polinomios completos que existen, según el orden de los términos. Es algo que muchos estudiantes dan por entendido, pero es bueno repasarlo.

Tipos de polinomios completos

Podemos clasificar los polinomios completos en dos tipos: polinomios completos ordenados y polinomios completos no ordenados o desordenados. Los primeros se caracterizan por tener una estructura que tiene los términos ordenados según los grados de la x. Empezando por el grado mayor y acabando por el término independiente.

Mientras que un polinomio completo desordenado, está expresado con los términos en un orden aleatorio. Por lo tanto, puedes encontrarte el término con mayor exponente al lado del término independiente. Pero, esta forma de expresar un polinomio es poco práctica, por eso te recomendamos que uses siempre los polinomios ordenados.

A continuación, te mostraremos un ejemplo de cada tipo, para que puedas apreciar bien la diferencia.

Polinomio completo ordenado

Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender el concepto de polinomios completos. Si tienes cualquier pregunta, no dudes en dejarla en los comentarios.